La figura del padre es determinante. Desde el punto de vista astrológico el padre es el sol, en los arquetipos es el héroe, en la mitología es Zeus. El padre es nuestra conexión más inmediata con el mundo real, lo material, lo práctico, lo que podemos tocar. papá es acción, determinación, voluntad, poder y reconocimiento
Mamá y Papá conforman una Unidad Sagrada. No podemos ir a uno, sin ir al otro. Esa unidad Sagrada, nos dio la vida, y desde allí es que podemos estar en la vida.
Cuando escucho, es que yo no tuve papá, le digo a la persona, claro que tuviste papá, que no estuvo en tu vida es otra cosa.
Imagínate por un instante una fecundación in vitro, dónde la mujer no sabe quién donó la esperma, ese hijo que nazca no sabrá quien fué el padre, pero sin duda hubo una figura masculina que entregó parte de sí, para que ese nacimiento se pudiera llevar a cabo.
Si no conoces a tu padre biológico, tu cuerpo y tu memoria celular si sabe quién es, y es posible que tu comportamiento también sea un reflejo de él, porque nadie puede ser excluido en ese proceso de concepción de un hijo.
Para poder tener bienestar físico y emocional tenemos que estar en armonía con nuestros padres, ya que de ellos vienen la vida y al tomarlos se nos brinda la energía y fuerza para vivir.
Somos 50% mamá y 50% papá, somos igualmente energía femenina y energía masculina. Ante ello no podemos excluir ni rechazar a ninguno de los dos, porque es como rechazarnos a nosotros mismos. Es de ahí la valía de tomar tanto a la madre como tomar al padre.
En la sociedad en que la que vivimos, la figura del padre se encuentra más ausente que el de la madre, pero esto no es motivo para que dejemos de reconocer la importancia de la energía del padre en nuestra vida
“Todo niño que es separado de su padre se distancia emocionalmente del mundo, como una manera infantil de honrarlo”
Bert Hellinger
Cuando nuestro padre ocupa su lugar con responsabilidad y amor, los hijos aprenden a ocupar su propio lugar en la vida sin rivalidades; de igual modo, de nuestro padre recibimos seguridad para triunfar.
Para las constelaciones familiares, el padre representa la autoridad, la firmeza, decisión y amparo. De la energía del padre tomamos la fuerza para lograr lo que queremos, el buen uso de nuestras capacidades, la habilidad para pedir lo que se quiere y el encumbramiento profesional.
¿Que energía nos aporta nuestro padre?
Con nuestro padre, tomamos toda aquella energía del mundo exterior, es la energía que nos hace ir hacia afuera, hacía el logro de nuestras metas, hacía los objetivos que nos trazamos en la vida; es esa energía que viene de nuestro padre la que nos ayuda a poner límites en todos los ámbitos de nuestra vida. Cuando solo tomamos a nuestra madre, hay soledad y aislamiento.
Bert Hellinger, el creador de las Constelaciones Familiares, dice que el padre llega a través de a madre. Que mamá es el puente que nos perite llegar a esa figura masculina tan importante para nosotros. Si la madre no permite esa relación y excluye al padre; incapacita a sus hijos para el éxito social y siembra en sus hijos una rabia que un día ellos le devolverán. Asimismo, todo niño añora el amor de su padre, si la madre interfiere en dicho amor, le resta fuerza a su hijo.
Una relación negativa entre la figura paterna y niño desencadena una personalidad regida por el estrés; en tanto que si los hijos eligen sólo a uno de los padres se pierde el equilibrio interno y comienza el sufrimiento y es posible que las adicciones, la ansiedad y la depresión se hagan manifiesto en cualquier momento de la vida del hijo
Cuando se piensa que es difícil aceptar al padre y honrarlo, y se le rechaza, por cualquiera que sea la razón, podemos quedar atorados con él, en la crítica, el reclamo, como si fuésemos aún niños esperando que nos den lo que no han podido darnos.
No obstante, lo que el padre nos da es lo que pudo darnos y no tenía más, no lo recibió de su propio padre e hizo lo mejor que tenía y sabía. Al asentir al padre tal como es, el sistema familiar nos respalda para que podamos continuar nuestra vida de la mejor forma posible según nuestro propio deseo. Sanar el vínculo con los padres es la forma de sanar nuestro vínculo con la vida.
¿Cómo se puede tomar al padre? Aquello que te gusta y aquello que no te gusta de papá, también está en ti.
Tomar al padre es asentir tal y como es, con sus luces y sus sombras. Con ello consigues la paz y puedes cambiar lo que no te gusta de ti. Tomar a tu padre te permite hacer tu vida de la mejor manera, tomando tu responsabilidad y hacer por ti lo que hasta ahora le has exigido a él.
Cuando tomamos al padre:
- Podemos tener la fuerza para tomar decisiones
- Logramos trazarnos objetivos y metas y alcanzarlas
- Nos aporta la capacidad de sentirnos cómodos con nosotros mismos
- Tener claridad mental
- Tener la capacidad de conocer y poner limites
- Podemos asumir con fuerza las tareas que nos trazamos
- Capacidad para emprender negocios
- Tener realización profesional
- La autoridad, firmeza, decisión.
- Ayudan a saber de dónde vienes y enfocarte a dónde vas.
- Ofrece usar tus capacidades a todos los niveles.
- La posibilidad de tomar la energía del mundo, que te hace ir hacia fuera.
- Concretar proyectos, salir del nido, avanzar en tu vida
- Enfocarte en la parte más social y laboral.
- La ayuda para tener un pensamiento lógico, lineal y matemático.
- La determinación a empezar nuevas relaciones, emigrar, cambiar de trabajo para prosperar…
A través de un movimiento de Constelación del Espíritu, la nueva mirada de las constelaciones familiares, logras comprender que esa separacón con nuestro padre es algo totalmente de nuestro ego, porque a nivel del Espítitu que todo lo creó, esa separación no existe.
Pongo a tu servicio mis conocimientos, para que puedas desde el amor, sanar ese vacío, esa ausencia de tu padre, y de esa forma ir, con fuerza a conquistar el mundo que deseas para ti.
